lunes, 29 de julio de 2024
domingo, 28 de julio de 2024
ALFABETIZACIÓN LATINA OBLIGATORIA EN LAS CIUDADES DE LA HISPANIA ROMANA
Esta claro que los habitantes de la Hispania se vieron obligados a aprender la nueva lengua que traían los romanos: el latín. Ya que todos los habitantes independientemente de su cultura y propia lengua, estaban obligados a leer y acatar los mensajes escritos sobre objetos inmóviles o móviles que publicaban los romanos, los que tenían una función pública y social. Ya que estuvieron visibles para todas las personas, por lo tanto las inscripciones públicas estaban destinadas y diseñadas para ser leídas en la calle, de forma anónima y colectiva por todos los ciudadanos. Ha este fenómeno se conoce como cultura escrita que se desarrolló durante todo el Imperio romano y que se impuso en la vida cotidiana.
Desde mí punto de vista, el idioma latín no solo se desarrolló sino que también se impuso; ya que iba en paquete con toda la romanización, de ahí que por su imposición formara parte de la vida cotidiana. El latín fue impuesto aunque este no fuera el idioma de nacimiento de los habitantes de Hispania y ni el más usado en ese momento, sino que fue impuesto por obligación para todas las culturas que habitaban Hispania con la llegada de los romanos. La cultura escrita romana en idioma latín, se vuelve cultura popular, cultura de la calle, literatura de la calle y patrimonio cultural público también para quienes no son romanos de nacimiento ni tienen raíces romanas, ya que lo imponen las leyes romanas, la obligatoriedad de leer y comprender el latín.
“La epigrafía constituía la forma de comunicación entre el poder y la población, el mecanismo de información de la administración de la justicia, de la promulgación de leyes” (Velázquez, 2018, 3) y “constituía también la forma de reconocimiento popular de prestigio de personajes” (Velázquez, 2018, 3) en la nueva sociedad fundada por los romanos. Por lo tanto todos los ciudadanos estaban obligados a saber leer y comprender los epígrafes que poblaron las ciudades romanas, y estos mismos debieron servir en gran manera al aprendizaje del latín que debió de convertirse en la lengua oficial en el Mundo Romano en Hispania. El aprendizaje por imposición dio lugar a ser una lengua usada también en el ámbito privado. La epigrafía latina era parte principal en “la vida cotidiana, fue cultura escrita y el prácticamente exclusivo medio -o el más importante- de comunicación de masas” (Velázquez, 2018, 3). El latín era el idioma usado en la política, los funerales, la poesía, el canto, el teatro, etc. y de manera oficial en comunicaciones de “carácter jurídico, decretos, conmemoraciones de triunfos” (Velázquez, 2018, 3). “Las inscripciones constituyeron el primer paso para la alfabetización” (Velázquez, 2018, 3) obligatoria en idioma latín y para la romanización de los pueblos de la Hispania.